Hacer preguntas abiertas (que no pueden ser contestadas con un sí o no) es una buena manera de que nuestros hijos e hijas (y nosotr@s) reflexionen e interioricen lo que les ocurre.

Más importante que la pregunta que les hagamos es nuestra respuesta hacia su contestación. Te doy varias pautas:
🧏🏻 Escúchale, déjale hablar sin interrupción.
🦋 No le juzgues.
🙊 Antes de contestarle, si te das cuenta de que algo de lo que ha dicho te molesta, respira profundamente antes de contestar y valida su opinión antes de dar la tuya.
Esto es muy importante. Una de las veces que le hice una de estas preguntas a mis hij@s, se me ocurrió dudar de lo que decía mi hija mayor (el momento más importante en su vida fue conocer el anime). Contestación de mi hija: si no me crees, mejor me callo ☹️
En cuanto al tipo de preguntas, te pongo varios ejemplos:
¿Cuál fue el momento más importante de tu vida?
¿Y el más bonito?
¿Qué es lo que más te gusta de ti?
Preguntas para que reflexionen sobre la espiritualidad:
¿Qué crees que pasa cuando una persona u otro ser, muere?
Si supieras que mañana te vas a morir, ¿qué harías hoy?
¿Qué crees que es la Divinidad?
¿Dónde está la Divinidad?
¿Cómo hablas con ella?
¡Probad y me contáis! Y sobre todo recordad que toda contestación es válida 😊
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